jueves, 8 de septiembre de 2011

Capítulo “De Roos”: el derrumbe de una leyenda

El pasado mes de febrero, publicamos en este Blog a modo de primer avance, una entrada referida al http://www.blogger.com/img/blank.gifCapítulo “De Roos”, donde los reactivadores de los Órdenes de Sabiduría del Rito Francés o Moderno en Francia obtuvieron su supuesta filiación iniciática, desembocando a finales de los 90 con la restauración/creación de algunos Grandes Capítulos Generales, como el del Gran Oriente de Francia, a partir del Soberano Capítulo Jean-Théophile Désaguliers (fundado en Neuilly), que asumió la función de Capítulo Metropolitano para Francia tras su creación por René Guilly.
El Capítulo Jean-Théophile Désaguliers recibió supuestamente una Patente y fue instalado en 1963 por los Oficiales del Capítulo holandés “De Roos”, el cual se dice había sido creado bajo el Primer Imperio y había continuado funcionando por milagro hasta la época moderna.

La investigación abierta al respecto, ha sido finalmente concluida y desarrollada por el H.•. Jean van Win, Coordinador del Departamento de Estudios Masonológicos de la Academia Internacional del Vº Orden de la Unión Masónica Universal del Rito Moderno, Vª Orden, Gr.•. 9, Miembro del Supremo Consejo del Rito Moderno – Brasil, y Muy Sabio del Soberano Capítulo “Prince de Ligne” de Bruselas, Bélgica. Ésta será en breve publicada en francés, español y portugués en diversos medios especializados.
Este trabajo, en el que he tenido el honor de colaborar con el H.•. Jean van Win, cuya reputación y prestigio es de sobras conocido por todos, derrumba la leyenda creada alrededor de este “Capítulo fósil” aportándonos las pruebas concluyentes, así como los testimonios de diversos actores de primera línea del panorama masónico, deshaciendo todo un embrollo que había sido cubierto con una cortina de humo y que, en cambio, era el sustento de la base argumental de los más férreos defensores de la única legitimidad de la práctica del Rito Moderno o Francés por transmisión de Carta Patente desde el Gran Capítulo General de Francia de 1784.
A veces, la verdad tiene un precio, y si bien es cierto que el único objetivo de esta investigación es aportar luz de una vez por todas a determinadas versiones boca-oreja, también lo es que su resultado estalla en las manos de aquellos que han querido autodenominarse como los únicos curadores de la práctica de los Órdenes de Sabiduría y garantes exclusivos del Rito Moderno o Francés. Toda una paradoja que va a dejar a más de un fundamentalista obediencial con cara de Poker.

Para que nos hagamos una idea a modo de previa, este estudio nos deja con unas conclusiones contundentes:

1) Los Altos Grados en los Países Bajos nunca fueron trabajados según el Rito Moderno Francés (GCG de Francia de 1784), aunque se constituyeron por analogía con dicho sistema, y jamás les fue otorgada Patente alguna por el Gran Oriente de Francia.
Los Países Bajos han trabajado sus Altos Grados Neerlandeses según sus necesidades específicas y en total independencia.

2) Los relatos publicados en Francia respecto a la masonería neerlandesa son contradictorios, obscuros y poco fiables, así como incompletos y parciales. La existencia de un “Capítulo fósil” de Rito Francés no solo no ha sido nunca demostrada, sino que jamás pudo existir.

3) El primer capítulo De Roos, en Medan, fue una creación salvaje del H.·. van Praag, y que no fue reconocido ni constituido por su autoridad legítima, salvo a título póstumo después de su disolución. El H.·. van Prag, tras la Segunda Guerra Mundial, reeditó la creación de un De Roos bis en La Haya, salvaje, en un contexto irregular y de una manera “autónoma” y muy “especial”.

4) El Capítulo De Roos de Medan jamás trabajó en Rito Moderno Francés, sino en Rito Holandés “por analogía” y sin la más mínima Patente. Guilly recibió por tanto una filiación holandesa pero de ningún modo una patente francesa.

5) Nunca hubo rito francés en Holanda, ni bajo el Imperio, ni antes, ni después. Por lo tanto, no ha podido existir ninguna filiación hacia Francia por este canal, que es inexistente.

6) Todo debe remontar, in fine, al Grand Chapitre Général de France, nacido en París en 1784, lo cual nadie pone en duda.

Pero el Supremo Consejo del Rito Moderno de Brasil ha quedado solamente como el único Chef d’Ordre del Rito Moderno o Francés habiendo tenido una actividad ininterrumpida en la masonería universal del Rito Moderno a través los siglos XIX y XX, hasta el día de hoy, autorizándole a denominarse el Supremo Consejo del Rito Moderno o Francés.

Joaquim Villalta, Vª Orden, Gr.•. 9
Miembro del Supremo Consejo del Rito Moderno - Brasil
Miembro de la Academia Internacional de la Vª Orden– U.M.U.R.M.

viernes, 2 de septiembre de 2011

Grand Chapitre des Grades de Sagesse


Membre du Sublime Conseil du Rite Moderne

et de l’Union Maçonnique Universelle du Rite Moderne

Patente : Le Grand Chapitre G.C.G.S dispose d’une Patente du Sublime Conseil S.C.R.M. pour la pratique souveraine des quatre ordres de Sagesse, en conformité avec la synthèse adoptée entre 1784 et 1786 par le Grand Chapitre Général de France, dont il est l’héritier.

Membres : Le Grand Chapitre assemble en son sein les Souverains Chapitres pratiquant dans sa tradition le Rite Français ou Moderne, et composés de membres de Loges symboliques de la Grande Loge Nationale Française.

Administration, finances, travaux : Le Grand Chapitre a pour vocation d’assister chaque Souverain Chapitre dans ses travaux symboliques, et chaque membre dans sa quête initiatique ; il ne s’occupe pas de l’administration et des finances des Chapitres ayant souhaité s’agréger à lui. Les problèmes de gestion matérielle sont du seul ressort d’associations loi de 1901 constituées entre les membres.

Le Grand Chapitre s’interdit aussi expressément es qualité toute intervention au sein des Loges symboliques, et y interdit à tout Frère titulaire d’un grade de Sagesse le port de bijoux ou décors ou encore tout signe, propos ou usage qui amèneraient une possible reconnaissance de leur appartenance aux grades de Sagesse. Celle-ci ne pouvant qu’être le fait de leur comportement accueillant, paisible et fraternel, et de la lumière apportée par leurs travaux.

Académie du 5e ordre : Les travaux du 5e ordre relèvent exclusivement du Sublime Conseil sur le plan national et de l’Union Maçonnique Universelle sur le plan international. Ils sont pratiqués en conformité avec les recommandations de l’Académie du 5e ordre, et la tradition maintenue sans discontinuité par le Suprême Conseil du Rite Moderne pour le Brésil depuis 1822, date de l’indépendance de la Maçonnerie et de l’Etat brésiliens. Ces travaux sont ouverts à tous les Frères et toutes les Sœurs de tous rites, disposant des grades requis, en conformité avec le règlement du G.C.G.F de 1784 ouvrant le 5e ordre à « tous les autres grades ou systèmes physiques ou métaphysiques » et destiné à mettre le Chevalier Rose-Croix, Nec Plus Ultra du Rite Français, sur le chemin de la fraternité universelle. Les décors du 5e ordre ne sont portés que dans ce cadre. Aucune marque distinctive n’est portée en tenue de Chapitre. Aucun titre autre que celui de « Frère » n’est porté, en dehors des dénominations provisoires apportées par les rituels, selon le poste tenu et le grade pratiqué.

Inter-visites : Les conditions d’accueil de tout visiteur disposant des grades requis sont, quelque soit sa qualité, laissées à l’appréciation du Souverain Chapitre.


Pour le Grand Chapitre

F. Jacques Rouchès, F. Patrick Bérard, F. Maxime Cianfarani

Pour le Sublime Conseil

F. Hervé Vigier, F. Victor Chelli